viernes, 30 de marzo de 2018

Afiches cinematográficos 2018 (III)

Uno de los detalles que más atrae de un afiche es la fecha de estreno que anuncia como si fuera una breve picada al interés.  Usualmente dispuesto en uno de los extremos del cartel, la fecha de estreno funciona como el mayor punto de atención para el espectador, más si es alguien que ha estado siguiendo de cerca la producción del filme, sea por su elenco, su director o su temática.

Tal fecha es una puntada para mantener el interés hasta que ocurra el estreno. No todos los afiches tienen esta fecha, pero los que sí, conjugan este dato con el diseño de la imagen.

Borrá todo lo que dije del amor porque no sabía bien quién era (2018) 
de Guillermina Pico. Documental.

A Ciambra (2017) de Jonas Carpignano. 
Ficción.

The Florida Project (2017) de Sean Baker.
Ficción.

Call Me By Your Name (2017) de Luca Guadagnino [2].
Ficción.


jueves, 29 de marzo de 2018

The Florida Project (Sean Baker, 2017)

The Florida Project (Sean Baker, 2017) se estrena esta semana en la cartelera argentina. Es una de las últimas en llegar de las nominadas al premio de la Academia. Cuenta las vidas de los habitantes de unos hoteles a las afueras de Orlando, vistas a través de los ojos de tres niños. Las complejidades de sus vidas, sobre todo de Moonee (Brooklynn Prince) y de Halley (Bria Vinaite), su madre, ponen en contraste el mundo de ilusiones del cual ellas están alejadas. Una vez más, el sueño americano es puesto en cuestionamiento con una realidad amarga.


Baker retrata las actividades de tres niños en su día a día: hacer travesuras en los hoteles y sus alrededores, comer helado, comer las sobras del restaurante donde trabaja Ashley (Mela Murder), la madre de uno de ellos, hacer más travesuras, ser testigos de las vidas que transcurren dentro de estos hoteles donde residen personas "temporalmente", y hacer más travesuras hasta que Ashley se entera y no permite que salgan más juntos.

Pero más allá de estas actividades, de estos días que parecen recesos prolongados donde no hay más enseñanza que la de ayudar a su madre con la venta de perfumes o la de hacer la vista gorda a cómo se prostituye su madre; Sean Baker muestra la vida que surge tras un proyecto venido a menos. En éste, se abre una grieta a las oportunidades ideales en un país que se jacta de su patriotismo y les hace lugar a los marginados. Pero en este retrato no hay victimización. Al contrario, hay rebeldía, inconformidad y crítica. Parecieran seguir el lema "se trabaja con lo que se tiene". Y así pasan los días.

En todo momento, Bobby (Willem Dafoe) está merodeando los predios del hotel para cumplir su función de encargado. Dafoe, nominado al Óscar en Mejor Actor de Reparto, le brinda mucha terrenalidad al personaje. El enfrentamiento que tiene con un viejo que se acerca a los niños con intenciones dudosas es uno de los momentos más humanos de la película, más allá de la compañía que le brinde de vez en cuando a los niños, entre chistes y regaños. Es una cara más cotidiana del Dafoe al que estamos acostumbrados en sus roles de villano.

Aún en ese final desesperado casi incongruente del filme, se siente la necesidad de una compensación frente a la solución cruda e inevitable en la que terminan cayendo Halley y Monee. Es fácil imaginarse, gracias a la actuación tan comprometida de Brooklynn, a una niña que crece a pesar de sus caídas así como lo hace el árbol que a ella le gusta. Pero cuesta mucho imaginar a su madre logrando lo mismo.


lunes, 26 de marzo de 2018

Shame (2011 - Steve McQueen): Observando por una mirilla a un adicto sexual

Un adicto al sexo es capaz de cualquier cosa para satisfacer su obsesión, sin importarle las consecuencias que puedan traer. Sin embargo, esto no significa que la persona esté satisfecha con su situación. Normalmente un adicto quiere detener su obsesión, pero lo encuentra imposible. 



En Shame, Brandon (Michael Fassbender) es un hombre de hábitos y rutinas. Es exitoso, atractivo y simplemente vive su vida normal día a día. Por un lado, parece tener una rutina como cualquier persona. Por otro lado, vemos su lado oscuro e intenso transformado por su obsesión. Brandon puede estar con cualquier mujer como se evidencia a lo largo de la película, pero su propia adicción e incapacidad de compromiso hacen que prefiera lo casual. Él mismo no se da cuenta de su obsesión, de sus acciones y el efecto directo que tienen sobre otros. El sexo es su droga y está en su mente constantemente. Se masturba en la ducha en la mañana, en el trabajo de día, y ve pornografía mientras cena de noche, ignorando totalmente el mundo a su alrededor. Se ven dos lados de Brandon, el que está constantemente observando a las mujeres y sexualizando todo, y el que es gentil, respetuoso y todo un caballero. 


Shame está llena de lenguaje corporal y Brandon es tan bueno para obtener sexo que sólo usando lenguaje corporal logra hacerlo hasta sin querer. Aún así, prefiere estar solo en su mundo sin cariño y sin fijación así nadie se acerca lo suficiente para saber su secreto. Esto es un comportamiento de los adictos ya que no quieren que nadie sepa sobre su adicción porque les traería vergüenza o prejuicio. Poco a poco, Brandon se comienza a dar cuenta de que su adicción está interfiriendo directamente en su vida e intenta lograr un poco de normalidad. Intenta cambiar deshaciéndose de su pornografía, todos sus desencadenantes y las cosas que causan provocaciones. Intenta buscar algo sentimental con una compañera de trabajo, pero todo esto dura poco y vemos cómo Brandon vuelve a ser el mismo de antes. Su adicción sigue siendo parte de él y no la puede controlar. No ha buscado la ayuda de nadie, ni ha dejado que alguien se acerque para mostrarle lo que se siente querer, y su adicción sigue interfiriendo en cada aspecto de su vida.


Una de las pocas relaciones que tiene Brandon es con su complicada hermana Sissy (Carey Mulligan). No son malas personas, sólo vivieron una vida complicada con malas experiencias en su pasado. Ella no ha tenido buena suerte en el amor y esto le molesta a Brandon porque siente que sólo acude a él cuando necesita ayuda o dónde quedarse una noche. Sissy es muy dependiente, pero tiene una linda relación con su hermano. Como vienen de tener pasados complicados, se apoyan mutuamente, se necesitan ambos y son sus anclas a la normalidad. Ella tiene tendencias suicidas, de adolescente se cortaba las muñecas. Su historia y su pasado está escrito en todas las cortadas que tiene en sus brazos. 

Una noche Brandon y su jefe David (James Badge Dale) van a ver a Sissy cantando en un bar. Su hermana sólo quiere demostrarle que ella no es una fracasada y que no es el desastre que parece. La rendición de Sissy de la canción "New York, New York" de Frank Sinatra es tan intensa y llena de emoción que hace llorar a Brandon. Es el primer momento que vemos a Brandon mostrar algún tipo de emoción o sentimiento con algo que no es sexo. Este momento de tranquilidad y felicidad dura poco ya que Sissy vuelve a sus viejas andanzas y tiene relaciones con David, quien está casado. Mientras esto sucede, Brandon está en la sala y se siente asqueado a que su hermana está en la otra habitación teniendo relaciones con su jefe mientras se escucha todo. Va de un lado al otro en la sala, y para él, esto es lo mismo que ver pornografía. Antes de que sea un desencadenante y tenga un arranque, Brandon decide salir a correr por las calles de Nueva York mientras escucha música clásica. Esta escena está en plano secuencia y es mi escena favorita de la película por como logran un tracking shot tan largo y fluido. Nos muestra como Brandon acude a las calles tranquilas y desocupadas de Nueva York solo para escaparse del caos, todo mientras escucha una composición de Bach.  Luego de esto la relación entre Brandon y Sissy cambia totalmente. 


Mientras su mundo colapsa, Brandon se deja llevar por su adicción, se entrega a sus deseos y pasa una noche de excesos, hasta para un adicto. En esos momentos su hermana lo necesitaba más que nunca y él ignoro a todo el mundo a su alrededor como siempre lo hace. Se dio cuenta muy tarde de su error y casi pierde a la única persona que realmente lo amaba. Brandon termina solo, bajo la lluvia llorando por todos sus errores, sus fallas como hermano, como amigo y como hombre. Es aquí que Brandon puede sentir algo mucho más real e importante que el placer. Brandon está lentamente en camino a ser una mejor persona y superar su adicción tras darse cuenta de que sí tiene un problema y que este problema está afectando a muchos.


Shame tiene actuaciones cautivadoras por parte de Michael Fassbender y Carrey Mulligan. Probablemente no fueron tomadas en cuenta para los premios Oscar por ser una película de clasificación NC-17 que para la Academia es equivalente a pornografía. A pesar de esto, Shame usa esta clasificación como signo de honor y demuestra que se puede llegar a contar una excelente historia. Steve McQueen y Sean Bobbitt repiten el uso de cinematografía artistica y deslumbrante que nos tienen acostumbrados en todas sus películas juntos. Usan constantemente el plano secuencia llenando la escena de fluidez y emoción, pero también lo acompañan con silencio y espacio.  Acompañando las escenas, está la banda sonora llevada a cabo por Harry Eascott. Carga de emoción, intensidad y sentimientos las acciones que transcurren en la pantalla. Shame puede no ser una película fácil de ver o de recomendar para muchos en principio por su contenido sexual. Aún así, no puedes dejar de verla. Tiene mucho mérito por haber tocado un tabú mundial como la adicción al sexo y lo hizo de una manera veraz y honesta. 



Javier Riquel
@JaviRiquel


jueves, 22 de marzo de 2018

Afiches cinematográficos 2018 (II)

Los afiches son la primera ventana hacia el mundo de la película. Los que presentamos esta semana son, en su mayoría, estrenos en la cartelera argentina y, en el caso de Call Me By Your Name, un filme que todavía está proyectándose en una sala de la ciudad.

La Reina del Miedo de Valeria Bertuccelli y Fabiana Tiscornia. Ficción.

Otra Historia del Mundo de Guillermo Casanova. Ficción.

Un Tigre Arriba de la Mesa de Mariana M. Bellone y Juan M. Varela. Documental.

Call Me By Your Name de Luca Guadagnino. Ficción.

domingo, 18 de marzo de 2018

Recordando: Amélie (2001 – Jean-Pierre Jeunet) Una película de amor para soñadores



Hace casi 17 años pasó por la pantalla grande y luego a todos nuestros corazones Amélie (Le Fabuleux Destin d'Amélie Poulain) o, su traducción literal, que es El fabuloso destino de Amélie Poulain. Es una muestra de que el amor verdadero existe y que el romanticismo está más que vivo. Si bien "son tiempos difíciles para los soñadores", Amélie rápidamente llegó para cambiar nuestras vidas, como dice el lema de su afiche.




Dirigida por Jean-Pierre Jeunet y escrita por el mismo Jeunet con Guillaume Laurant, Amélie trata de una joven camarera (interpretada por Audrey Tautou) que trabaja en el Café des 2 Moulins tras decidir cambiar su vida y salir de la casa de su padre. Su infancia fue distinta a la de los demás ya que pasó mucho tiempo sola. Su padre la diagnosticó erróneamente con un problema del corazón por el cual fue criada y educada en casa. Debido a esto, la joven Amélie desarrolla una imaginación activa y un poco inusual. 

Su madre murió cuando un turista decidió suicidarse y cayó encima de ella al saltar de la catedral de Notre Dame. Esto empeoró su soledad y también la de su padre. Amélie no tiene novio ya que lo intentó en varias oportunidades, pero los resultados la desanimaron. Amélie prefiere disfrutar de los simples placeres de la vida como meter su mano en sacos de legumbres, romper la capa caramelizada del crème brûlée con una cuchara, lanzar piedras en el canal de San Martin, entre otros. A estos placeres se le agrega hacer feliz a la gente cuando en shock por la muerte de Lady Di consigue una caja de un niño que contiene tesoros de hace 40 años. Dispuesta a encontrarlo y devolverle su tesoro, si logra conmoverlo se convertiría en una vengadora del bien y si no, no pasaría nada. Al conseguirlo y ver que no sólo estaba feliz por ver toda su infancia en esta cajita, sino que también cambiaría su vida actual para mejor gracias a esto. Amélie desde este momento se fija una misión: traerles felicidad a todos en su entorno sin que éstos se den cuenta. Se plantea hacerlo de la manera más entretenida y alegre posible.


Amélie ayuda a todos a su alrededor en conseguir felicidad. Entre éstos está un vecino, el asistente del dueño de la verdulería, su compañera de trabajo y hasta su padre. Poco a poco se comienza a dar cuenta de que mientras ella hace todo esto por los demás, nadie se está preocupando en hacer lo mismo por ella. Amélie conoce a Nino (Mathieu Kassovitz) un chico tan peculiar y soñador como ella. Éste capta su atención, pero ella es muy tímida para un encuentro cara a cara. Prefiere algo más espontáneo y casual. Después de intentar varias veces sin éxito, casi desiste hasta que Reymond (Serge Merlin) el vecino que ella misma ayudo le recuerda que no pierda de mente el propósito inicial de su misión: la felicidad que también incluye la suya. Gracias a este consejo Amélie se atreve y logra conseguir la felicidad que tanto buscaba.


De Amélie se puede decir que es la segunda película francesa más taquillera, la cuarta más taquillera de habla no inglesa. Que fue nominada para cinco premios de la Academia (Mejor Película Extranjera, Mejor Guión Original, Mejor Fotografía, Mejor Dirección Artística, y Mejor Sonido) entre otras nominaciones y triunfos. Se puede decir que el seleccionador oficial del Festival de Cannes la rechazó por parecerle "poco interesante " y no fue mostrada durante el Festival, mientras que en la premiere cautivó a todo el público y los medios. Pero mejor es decir que es un filme exquisito que te hace reír, llorar de tristeza y luego de felicidad y cuando terminas piensas igual que Amélie y quieres ser un vengador del bien. El crítico Roger Ebert comentó que la ves y luego piensas sobre ella y te hace sonreír y esto no puede ser más lejos de la verdad. Es una historia que te recuerda lo que se siente enamorarse con locura. Está llena de hermosas tomas de París envuelta en una paleta de verde y rojo. La banda sonora de Yann Tiersen completa esta aventura llena de emoción y sentimientos que nos contagian. Es una película para soñadores y es difícil que no lo sea con la fórmula para el amor verdadero. Luego de verla terminas sintiendo algo que sólo puedes volver a experimentarlo viéndola de nuevo.


Frases de Amélie:

“Son tiempos difíciles para los soñadores.” 
“La vida no es más que un interminable ensayo, de una obra que jamas se va a estrenar.” - Hipolito
“Usted nunca será una hortaliza porque incluso las alcachofas tienen corazón.” - Amélie
“Es curiosa la vida. Cuando eres niño el tiempo no acaba de pasar, y luego sin darte cuenta tienes 50 años, y de la infancia lo único que te queda cabe en una cajita oxidada.” - Dominique Bretodeau
"Sin ti las emociones de hoy no serían más que la piel muerta de las emociones de ayer." - Hipolito

Javier Riquel
@JaviRiquel

El mar, el mar. Aus dem nichts/In the Fade (Fatih Akin, 2017)

Hay películas sobre las que es difícil hablar o escribir. Retratan a través de imágenes un vacío que, si bien es humano, es un tanto sobrehumano soportarlo. In the Fade es una de esas películas. Hay vacíos de los que es mejor no hablar, aunque lo más recomendable sea ver tales vacíos como enseñanza o como muerte.

Afiche taiwanés de In the Fade
Fatih Akin recompone aquí el duelo de Katja (Diane Kruger), una mujer tras la pérdida de su esposo y de su hijo en un atentado terrorista ocurrido en Alemania. ¿Cuál es el rol de una mujer que repentinamente deja de ser madre y esposa para convertirse en una demandante de justicia? 

La película hace esta recomposición a partir de tres capítulos que cuestionan el rol de la justicia frente al núcleo familiar y las condiciones ambiguas dentro de las que se llevan a cabo las acusaciones. Los capítulos son: la familia, la justicia y el mar. Son aristas donde al menos una o dos composiciones de planos resuenan por encima de las otras. No vale la pena destacarlas porque sería descontextualizar su sentido frente al resto del filme. Lo que sí importa es cómo las imágenes se convierten en gérmenes de sentido por encima de la palabra. Estamos frente al duelo y el silencio de una madre, y cómo la justicia intenta compensar la pérdida.

Queda por verse si tanto la justicia como la madre fallan por recomponer la carencia, pero siempre está el mar. Si aquí parece un testigo bastante circunstancial (¿tal vez una atajo simbólico de los guionistas?). lo cierto es que es donde Katja reconoce el esfuerzo propio y el de su abogado en el caso. Poco queda por hacer fuera de esto. Poco al menos dentro de lo legal y es ésta la mirada final de Katja antes de que termine la película, una mirada de determinación, de "hasta aquí me trajo la corriente". "En esto me he convertido", nos sugieren los ojos resignados de Diane Kruger antes de actuar.

Pareciera, al final, que el filme no podía terminar de otra manera. Pareciera porque la postura de Akin nunca determina, sino que sugiere.

Diane Kruger interpretando a Katja
como testigo en el juicio de los posibles culpables

viernes, 16 de marzo de 2018

Afiches cinematográficos 2018 (I)

Los afiches son de los primeros, si no los primeros, objetos que dan a conocer y difundir una película. Son la primera invitación que recibe el espectador a verla, sea en las paredes fuera de la sala de cine, en una valla publicitaria o en internet. Los afiches son la primera obra (de arte) que recibimos antes de ver la película, por supuesto después de tener las primeras noticias de quiénes están vinculados con el proyecto y el desarrollo de su producción.

Un afiche puede sugerir de lo que se trata la película o inquietarnos para que la veamos. En el mejor de los casos, ocurren ambas reacciones. También son harto conocidos los posters a los que sólo les importa dar a conocer los rostros de las estrellas vinculadas en el proyecto. No serán éstos los afiches que nos interesen aquí, a menos que sean una ida en contra de este modo de trabajar como ocurre en uno de los presentes a continuación.

Para celebrar la inclusión de una nueva categoría en la Guayaba de Oro, Mejor Afiche, una vez a la semana dedicaremos una entrada a cuatro afiches de las películas estrenadas este año en las salas de cine argentinas o venezolanas.

Si todo sale bien, una vez al mes entrevistaremos al diseñador de alguno de los afiches de filmes recientes.

Adiós, entusiasmo (2018) de Vladimir Durán. Ficción.
Diseño por Ale Mott y foto de Nora Lezano.

The Killing of a Sacred Deer (2017) de Gyorgos Lanthimos. Ficción.
Diseño del afiche por Vasilis Marmatakis.


Los territorios (2018) de Iván Granovsky. Documental.
Diseño del afiche por Felipe Chodin.

domingo, 11 de marzo de 2018

Dos veredictos por Rafael Lander

A poco más de un mes de celebrar la tercera ceremonia de la Guayaba de Oro, procedemos a publicar dos veredictos completos escritos por Rafael Lander y dedicados a los ganadores en las categorías de Mejor Fotografía y Mejor Guión.

En la categoría de Mejor Fotografía hubo un empate, el primero en la categoría y el tercero en los tres años que tiene el premio. Los ganadores fueron Christopher Blauvelt por Certain Women y Hoyte van Hoytema por Dunkirk.

Del primero, Rafael señala:

"Desde los lentes y objetivos dirigidos por el sueco Hoyte van Hoytema, acostumbrado ya a las grandes producciones de Hollywood y acompañando por segunda vez al director general Christopher Nolan, se presentan al espectador los climas y espacios en donde se desarrolla el plan de evacuación militar conocida también como la Operación Dinamo. En Dunkirk no sólo destacamos la precisión y el manejo de la cámara en movimiento tanto en espacios abiertos como cerrados sin que se pierda la vertiginosidad de la historia-angustiosa lucha de aquellos hombres por mantener la única victoria que parece posible - seguir viviendo -, sino que la ausencia del rostro enemigo hace que las imágenes  de la costa y del mar nos arrastren hacia las orillas de tal afirmación: el mar es más terrible y frío que todas las guerras".



Del segundo, destaca:

"Por parte de Christopher Blauvelt, nuevamente al lado de Kelly Reichardt, con quien colabora por tercera vez en la dirección fotográfica, valoramos la sutil matización con que describe los paisajes y las estructuras de un villorio de Montana. Desde la expectación y el silencio se conjugan los estados de ánimo y el destino de los personajes. En Certain Women, como en casi todas las películas de la directora, donde los argumentos y diálogos parecen contar menos que los gestos y la fijación de la cámara de ciertos materiales y ciertas naturalezas, logran que la imagen sea el centro de una poética particular, sensible, bella, honesta".



Certain Women también terminaría ganando Mejor Director para Kelly después de lograr cinco nominaciones, entre ellas: Mejor Actriz para Michelle Williams, Mejor Actriz de Reparto para Lily Gladstone y Mejor Elenco.

Finalmente, añade que "nos complace celebrar a 20th Century Women como ganadora en la categoría de Mejor Guión. Mike Mills encierra, en las relaciones de un grupo familiar sitiado por mujeres en torno a las vivencias y educación de un adolescente, un movimiento histórico, que si bien no es representado en profundidad, decora y ambienta el espíritu de una época en donde la figura femenina recién avanza hacia la modificación de estructuras, concepciones morales y sociales preconcebidas del siglo xx. Un guión escrito con un pulso errático, en donde el telar de los discursos y voces de sus personajes fragmenta el tiempo para introducir acontecimientos pasados y futuros desde un presente, dueño de incertidumbres y nostalgias, que avanza con acciones y diálogos hacia la abundancia colorida y sonora de la vida".  



Aunque no ganó el premio mayor, 20th Century Women se llevó cinco premios la noche del lunes 5 de marzo: dos para sus actrices Annette Bening y Greta Gerwig, uno para el elenco, uno por la música y éste por su guión. Ganó la misma cantidad de premios que Carol el año pasado, pero obtuvo una nominación más que el filme de Todd Haynes.

sábado, 3 de marzo de 2018

Lady Bird (Greta Gerwig, 2017), una carta de amor sin entregar

En una conversación entre Christine "Lady Bird" y la madre superiora, ésta le hace reflexionar que la atención y el amor son la misma cosa. Y probablemente sea este encuentro tan liviano y sincero el que resume toda la película. Porque más allá de las interacciones con varios chicos "vacíos" y más acá de las interacciones familiares a un mismo tiempo conflictivas y enriquecedoras, ésta es una humilde carta dedicada a las vidas de Sacramento.

En el baile de graduación al que finalmente sí asisten Christine y Jules, ante esa noche estrellada con Danny o en las conversaciones que tiene Lady Bird con varios personajes, la película retrata vidas bastante solitarias que se separarán después de la graduación. La historia incluso da un paso adelante y muestra una de las primeras noches de Christine después de que todo esté decidido. Y en esa brevísima escena donde está en el hospital, ante un niño enyesado y acompañado por su madre, nos damos cuenta de la soledad a la que apela el filme. Como si diciendo "nadie te acompañará como lo hizo tu madre".

Pero no hay reproche en este "darse cuenta". No lo hay al menos como sí lo hay por parte de su madre. Es simple realización de cómo se desenvuelve la vida como una certera soledad. Todos estos personajes están luchando contra algo. A veces o a ratos es algo claro, otras veces es más confuso e impredecible. Puede ser una lucha propia contra cierta pose social, como es el caso de Kyle (Timothée Chalamet); puede ser contra la depresión, como el papá de Lady Bird (Tracy Letts); puede ser contra sus propias creencias, como es el caso de Christine.

Tal lucha es sólo un matiz dentro de las actuaciones del elenco. Unos tienen más oportunidad que otros por el peso del personaje dentro de la historia, pero todos los actores le brindan una fuerza a la película que le brinda un carácter único al resultado final. Saoirse Ronan es la que lidera tal energía con una presencia rebelde que, como cualquier persona, cae en sus propias trampas como el de verse atraída por la popularidad. Pero ni siquiera esto minimiza la película de ser un retrato agudo de las soledades que nos rodean.


viernes, 2 de marzo de 2018

¿Cuál es tu categoría o momento más esperado para la 90ª edición de los Oscars?

Después de una larga espera, este domingo se celebra la ceremonia de los premios de la Academia donde se reconocerá lo mejor del cine de 2017. Lo mejor, claro está, según unos seis mil quinientos miembros de la industria cinematográfica, mayoritariamente blancos, por encima de los sesenta años y, en gran medida, estadounidenses.

Pero uno, por masoquista, faramayero, cinéfilo o todas juntas, vuelve un año tras otro al premio con más trayectoria y difusión que cualquier otro premio de cine en el mundo. Vuelves porque, más allá de los mismos montajes celebratorios o premios cantados desde el comienzo de la temporada, hay momentos genuinos de la ceremonia que superan lo predecible del momento o los discursos de agradecimientos apresurados por la música de la orquesta.

Este año, para mí, los momentos más esperados serán, como mucho, cuatro. No, no será Frances McDormand, una de mis actrices favoritas, ganando su segundo Oscar por una actuación demasiado rígida, si bien asoma visos de humanidad. El primero será James Ivory ganando por el guión de Call Me By Your Name, una de las mejores películas que habrá en cartelera este año. La agudeza de James extrayendo los momentos futuros de Elio y Oliver, y afinando los detalles de ciertas escenas, resuena de diversas maneras sobre la película.

El segundo momento será cuando Sufjan Stevens interprete en el escenario "Mystery of Love". Si esta presentación tiene la mitad de la potencia que tuvo en la película, será uno de los mejores momentos de la ceremonia.


El tercer momento será cuando Coco gane Mejor Película Animada. Si bien Pixar suele ganar esta categoría, aún cuando ni siquiera es la favorita (como en el caso de Brave), el retrato del talento frente a la muerte de este filme merece todo el reconocimiento. Ojalá pudiera ganar en Mejor Canción Original, siendo "Remember Me" un pivote para la historia.

El cuarto momento es mucho más complicado que ocurra, pero de pasar será uno de los triunfos más humanos y agudos en la historia reciente de la Academia: Visages, Villages de Agnès Varda y JR en Mejor Documental. Sería uno de los premios más merecidos de la noche, por lo que es bastante difícil que ocurra.


¿Cuáles son tus categorías o momentos más esperados para este domingo? Escribe en los comentarios.