lunes, 26 de marzo de 2018

Shame (2011 - Steve McQueen): Observando por una mirilla a un adicto sexual

Un adicto al sexo es capaz de cualquier cosa para satisfacer su obsesión, sin importarle las consecuencias que puedan traer. Sin embargo, esto no significa que la persona esté satisfecha con su situación. Normalmente un adicto quiere detener su obsesión, pero lo encuentra imposible. 



En Shame, Brandon (Michael Fassbender) es un hombre de hábitos y rutinas. Es exitoso, atractivo y simplemente vive su vida normal día a día. Por un lado, parece tener una rutina como cualquier persona. Por otro lado, vemos su lado oscuro e intenso transformado por su obsesión. Brandon puede estar con cualquier mujer como se evidencia a lo largo de la película, pero su propia adicción e incapacidad de compromiso hacen que prefiera lo casual. Él mismo no se da cuenta de su obsesión, de sus acciones y el efecto directo que tienen sobre otros. El sexo es su droga y está en su mente constantemente. Se masturba en la ducha en la mañana, en el trabajo de día, y ve pornografía mientras cena de noche, ignorando totalmente el mundo a su alrededor. Se ven dos lados de Brandon, el que está constantemente observando a las mujeres y sexualizando todo, y el que es gentil, respetuoso y todo un caballero. 


Shame está llena de lenguaje corporal y Brandon es tan bueno para obtener sexo que sólo usando lenguaje corporal logra hacerlo hasta sin querer. Aún así, prefiere estar solo en su mundo sin cariño y sin fijación así nadie se acerca lo suficiente para saber su secreto. Esto es un comportamiento de los adictos ya que no quieren que nadie sepa sobre su adicción porque les traería vergüenza o prejuicio. Poco a poco, Brandon se comienza a dar cuenta de que su adicción está interfiriendo directamente en su vida e intenta lograr un poco de normalidad. Intenta cambiar deshaciéndose de su pornografía, todos sus desencadenantes y las cosas que causan provocaciones. Intenta buscar algo sentimental con una compañera de trabajo, pero todo esto dura poco y vemos cómo Brandon vuelve a ser el mismo de antes. Su adicción sigue siendo parte de él y no la puede controlar. No ha buscado la ayuda de nadie, ni ha dejado que alguien se acerque para mostrarle lo que se siente querer, y su adicción sigue interfiriendo en cada aspecto de su vida.


Una de las pocas relaciones que tiene Brandon es con su complicada hermana Sissy (Carey Mulligan). No son malas personas, sólo vivieron una vida complicada con malas experiencias en su pasado. Ella no ha tenido buena suerte en el amor y esto le molesta a Brandon porque siente que sólo acude a él cuando necesita ayuda o dónde quedarse una noche. Sissy es muy dependiente, pero tiene una linda relación con su hermano. Como vienen de tener pasados complicados, se apoyan mutuamente, se necesitan ambos y son sus anclas a la normalidad. Ella tiene tendencias suicidas, de adolescente se cortaba las muñecas. Su historia y su pasado está escrito en todas las cortadas que tiene en sus brazos. 

Una noche Brandon y su jefe David (James Badge Dale) van a ver a Sissy cantando en un bar. Su hermana sólo quiere demostrarle que ella no es una fracasada y que no es el desastre que parece. La rendición de Sissy de la canción "New York, New York" de Frank Sinatra es tan intensa y llena de emoción que hace llorar a Brandon. Es el primer momento que vemos a Brandon mostrar algún tipo de emoción o sentimiento con algo que no es sexo. Este momento de tranquilidad y felicidad dura poco ya que Sissy vuelve a sus viejas andanzas y tiene relaciones con David, quien está casado. Mientras esto sucede, Brandon está en la sala y se siente asqueado a que su hermana está en la otra habitación teniendo relaciones con su jefe mientras se escucha todo. Va de un lado al otro en la sala, y para él, esto es lo mismo que ver pornografía. Antes de que sea un desencadenante y tenga un arranque, Brandon decide salir a correr por las calles de Nueva York mientras escucha música clásica. Esta escena está en plano secuencia y es mi escena favorita de la película por como logran un tracking shot tan largo y fluido. Nos muestra como Brandon acude a las calles tranquilas y desocupadas de Nueva York solo para escaparse del caos, todo mientras escucha una composición de Bach.  Luego de esto la relación entre Brandon y Sissy cambia totalmente. 


Mientras su mundo colapsa, Brandon se deja llevar por su adicción, se entrega a sus deseos y pasa una noche de excesos, hasta para un adicto. En esos momentos su hermana lo necesitaba más que nunca y él ignoro a todo el mundo a su alrededor como siempre lo hace. Se dio cuenta muy tarde de su error y casi pierde a la única persona que realmente lo amaba. Brandon termina solo, bajo la lluvia llorando por todos sus errores, sus fallas como hermano, como amigo y como hombre. Es aquí que Brandon puede sentir algo mucho más real e importante que el placer. Brandon está lentamente en camino a ser una mejor persona y superar su adicción tras darse cuenta de que sí tiene un problema y que este problema está afectando a muchos.


Shame tiene actuaciones cautivadoras por parte de Michael Fassbender y Carrey Mulligan. Probablemente no fueron tomadas en cuenta para los premios Oscar por ser una película de clasificación NC-17 que para la Academia es equivalente a pornografía. A pesar de esto, Shame usa esta clasificación como signo de honor y demuestra que se puede llegar a contar una excelente historia. Steve McQueen y Sean Bobbitt repiten el uso de cinematografía artistica y deslumbrante que nos tienen acostumbrados en todas sus películas juntos. Usan constantemente el plano secuencia llenando la escena de fluidez y emoción, pero también lo acompañan con silencio y espacio.  Acompañando las escenas, está la banda sonora llevada a cabo por Harry Eascott. Carga de emoción, intensidad y sentimientos las acciones que transcurren en la pantalla. Shame puede no ser una película fácil de ver o de recomendar para muchos en principio por su contenido sexual. Aún así, no puedes dejar de verla. Tiene mucho mérito por haber tocado un tabú mundial como la adicción al sexo y lo hizo de una manera veraz y honesta. 



Javier Riquel
@JaviRiquel


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